lunes, 30 de marzo de 2009

Reflexiones sobre la intervención de Caja Castilla-La Mancha

Como es sabido, el domingo 29 de marzo Caja Castilla-La Mancha ha sido intervenida por el Banco de España ante su grave situación financiera (la auditoría encargada por UNICAJA para estudiar su posible fusión cifraba un agujero de 3.000 millones de euros). Respecto a esto quiero hacer las siguientes reflexiones:
1º.- Los miembros del Consejo de Administración de Caja Castilla-La Mancha son los siguientes: Presidente Juan Pedro Hernández Moltó, Diputado por el PSOE en varias legislaturas, se hizo famoso por su ataque a Mariano Rubio en el parlamento (“Míreme a los ojos Sr. Rubio, si es que todavía le queda vergüenza ...”, frase para la posteridad); Vicepresidente primero Federico A. Rodríguez Morata, Concejal del PSOE en Albacete; vicepresidente segundo Ángel Nicolás García, ex presidente de la Federación de Empresarios de Toledo FEDATO; Consejero Secretario Ismael Cardo Castillejo, Vocal de la Junta electoral de Cuenca por el PSOE; Vocal Amalia Blanco Paños, Presidenta mujeres Empresarias de Albacete AMEPAP; Vocal Augusto Germán Chamón Arribas, Concejal de Altarejos por el PP; Vocal Florencio Fernández Gutiérrez, Alcalde de Urda por el PSOE; Vocal José María Fresneda Fresneda, Secretario General del Sindicato ASAJA; Vocal Luis Francisco Galán Polo, a propuesta del PP; vocal Carlos Jiménez Morante, sindicalista de la UGT; Vocal Emilio Loriente Piqueras, a propuesta del PP; Vocal Antero Luján Alzallu, en representación de los impositores; Vocal Tomás Martín- Peñato Alonso, Diputado del PP; Vocal José Fernando Sánchez Bódalo, Alcalde de Alcazar de San Juan por el PSOE; Vocal Eugenio Sánchez García, Diputado regional por Albacete del PSOE.
De los 15 miembros del Consejo de Administración de CCLM: 10 son políticos (6 del PSOE, incluyendo al presidente y a uno de los vicepresidentes y 4 del PP, todos vocales) y 2 son sindicalistas (1 de la UGT y otro de ASAJA). Es decir, 13 de los 15 miembros del Consejo de Administración estaban ahí por ser políticos o sindicalistas.
Esta situación es extrapolable a todas las demás Cajas de Ahorros existentes en España, que son controladas por representantes de los Partidos Políticos dominantes en el ámbito territorial de la Caja de turno. Y yo pregunto ¿se puede dejar una gran parte del sector financiero español en manos de unas Cajas controladas por cargos políticos, en la muchos casos sin preparación ni formación en temas financieros?.
2º.- Las Cajas están muy vinculadas al negocio de la construcción. Son, en mayor medida que los Bancos, las que financian la construcción de viviendas en España. Con el sector de la construcción en crisis es lógico que las Cajas también lo estén. De esto no son culpables los directivos políticos de las Cajas. Pero yo me pregunto ¿con una dirección menos política y más profesional no se habría tratado de minimizar riesgos? Por ejemplo, ¿Cuántas viviendas le habrá enganchado el Pocero a CCLM en un proyecto tan arriesgado y dudoso como el de Seseña?.
3º.- Las Cajas debido a su dirección política son propensas a involucrarse en proyectos de marcado carácter político y dudosa rentabilidad económica a medio y largo plazo. Por ejemplo, en el caso de CCLM un aeropuerto para Ciudad Real. Estos proyectos, desde luego, no ayudan a sanear sus cuentas.
Este es el tipo de reflexiones que deberíamos hacer los ciudadanos para exigir de los políticos los cambios necesarios para que situaciones como la de CAJA CASTILLA-LA MANCHA no se vuelvan a producir. Porque al final, quién va a avalar la mala gestión de esta Entidad somos todos con nuestros impuestos. Y estamos hablando de 9.000 millones de euros ya aprobados por el Consejo de Ministros el mismo día 29 de marzo. Casi nada.